Las terapias naturales, alternativas y complementarias conforman un sistema de técnicas y conocimientos del ser humano y de la naturaleza, para prevenir y tratar diferentes desequilibrios en la salud general, a la cual se considera y trata de una manera holística considerando todos los aspectos : física, energética, emocional, mental y espiritual. Estas terapias son usadas, investigadas, registradas y difundidas a lo largo de los tiempos, en diferentes partes del mundo, hoy en día son cada vez más usadas, investigadas, renovadas, enriquecidas, formando una base de conocimiento y experiencia.
Esta medicina tradicional, que nos acompaña a lo largo de los siglos es reconocida en muchos países del mundo, no solo por los legisladores y administradores del sector de la salud, sino fundamentalmente por los usuarios, porque se constituye en una opción para la atención de sus necesidades, mejora la respuesta a su recuperación, les trae mejoría en la calidad de vida general y bienestar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce las terapias naturales, alternativas y complementarias, su uso y beneficios para los pacientes, propone un plan global respecto de esas prácticas. Este plan busca integrarlas a los Sistemas de Salud de los países, a través de regulaciones, para hacer que el uso sea seguro, accesible y sostenible en beneficio de los pacientes y su salud general, dada la diversidad y extensión del uso.
Cada vez más las personas recurren a estos servicios porque encuentran una manera de cuidar su salud, prevenir y mejorar sus problemas ya existentes, aumentan su calidad de vida y bienestar.
Dentro de este gran conjunto de terapias que conforman las terapias naturales, alternativas y complementarias tenemos un grupo importante que trata de la energía y todo lo referente a ella, son las terapias energéticas y vibracionales.
Las terapias energéticas y vibracionales parten de la visión de que todo es energía, que somos energía, que nuestro estado de conciencia es vibración, que nuestra conciencia puede alterar el funcionamiento de nuestros pensamientos, emociones y el estado de salud, calidad de vida y bienestar.
Cuando una persona se desequilibra y se bloquea, provoca pérdida de vitalidad, desequilibrios en todos los cuerpos energéticos (físico, emocional, mental, energético, espiritual) y chacras (centros energéticos), dolor, conflictos, sufrimiento, malestar y finalmente enfermedades.
Las terapias energéticas y vibracionales son complementarias a cualquier tratamiento que se realice, sea médico, psicológico, odontológico, quirúrgico, de recuperación de lesiones, estético, ayuda y acelera la recuperación, aumenta la calidad de vida, el bienestar y la armonía.
No tienen contraindicaciones, pueden ser aplicadas con éxito en bebés, niños, adultos, ancianos, animales y plantas con enormes beneficios. No sustituye buscar asistencia médica.
Las terapias energéticas y vibracionales actúan en el sistema energético como un todo, desbloquean, bioregulan, reprograman y armonizan todo los cuerpos energéticos, porque tiene una visión del ser humano completo, una visión holística.
El proceso terapéutico brinda, herramientas, técnicas y conocimiento sobre uno mismo, el entorno, ayuda a descubrir, aprender a focalizar y usar la energía de manera más armoniosa y consciente, para generar estados de salud, paz interior, bienestar y armonía.
Un programa de bienestar es el comienzo de la recuperación y transformación de la calidad de vida, del bienestar general, del crecimiento personal, eleva el estado de conciencia para comprender este proceso. El terapeuta acompaña, apoya y ayuda a generar cambios en el estilo de vida, prevención y cuidados de la salud general, enseña herramientas para que quien consulta llegue al bienestar y a la armonía interior que busca, en un ambiente de confianza y sin juicios, que propicie la relajación, la claridad, la paz interior, el bienestar y la armonía.
Somos Armonía cuenta con su propia metodología que une técnicas y conocimientos milenarios, con las teorías y métodos más modernos, siempre centrándose en la persona, en su individualidad, necesidades y gustos.
Las terapias energéticas y vibracionales traen beneficios a quien las utiliza: aumenta la calidad de vida, propicia los cambios interiores, trae paz interior, autoconocimiento, relajación, bienestar, mejora dolores y estados crónicos, mejora la ansiedad, la depresión, mejora el estado de ánimo en general. Las terapias energéticas y vibracionales elevan el estado de consciencia y vibración, limpian, reequilibran, bioregulan el sistema y los centros energéticos, recuperando la armonía perdida, trabaja a la persona como un todo, acompañando, apoyando para que cada uno encuentre su manera de buscar y transitar por caminos que lleven una vida mejor, más equilibrada, armoniosa que genere salud, bienestar y armonía.
Paola Ostrowicz Fischman
Terapeuta energético y vibracional
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