Qué pasa cuando me acepto sin juzgarme? Vives el momento presente, dejas de preocuparte, de reprocharte, de sentir culpa, de tener miedo, empiezas a cambiar poco a poco tu percepción sobre las experiencias que vives, las comprendes, aprendes con ellas, las superas y así vuelves a disfrutar del camino de la vida.
Toda transformación por pequeña que sea lleva también a un cambio en tu vibración, en tu estado de conciencia, en tu energía, en tu vitalidad, fluyes de otra manera.
Cuando te aceptas sin juzgarte tu diálogo interior cambia, tus pensamientos y emociones cambian, tu autoestima se fortalece, llevándote paulatinamente a superar tus dificultades, a sanarte, a reencontrarte con tu bienestar y armonía.
La aceptación de uno mismo, del momento que vivimos, de nuestras luces y sombras, es la manera de comenzar un camino de cambios y crecimiento personal, es amarte, respetarte, cuidarte.
Aceptarse no quiere decir justificar tus errores y fragilidades, no responsabilizarte por ellos, no repararlos, así solo estarías postergando tus problemas, haciendo que tus heridas continúen doliendo, que tus dificultades sean cada vez más grandes, aumentando tu malestar, tu desanimo, tu falta de energía.
Aceptar y comprender tu momento es dar el primer paso, empezar a recorrer un camino diferente, no quieras resolver tus dificultades de la misma manera que te trajeron hasta aquí.
Vive el momento presente, acéptate sin juzgarte así estarás transitando por caminos diferentes, caminos de superación, sanación, amor, bienestar y armonía.
Paola Ostrowicz Fischman
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