Todos tenemos límites de tolerancia, que cuando los ultrapasamos, o permitimos que otros ultrapasen sin darnos cuenta, o porque sentimos miedo a ser rechazados, a no agradar, aguantamos cosas que terminan dañándonos por dentro. Ese daño lo achacamos a los demás, olvidamos que de alguna forma lo permitimos abriendo la puerta al otro a hacerlo.
Cuando el miedo al rechazo actúa, cuando su energía se hace presente, algo en nuestro interior, se siente empujado a actuar buscando la aprobación de los demás, perdiendo la comunicación con nuestra esencia, dejamos de ser nosotros mismos.
En esas situaciones de miedo, hay una especie de necesidad de recibir la aprobación por parte de los demás. En general a todos nos gusta y necesitamos sentir que encajamos, sentir que hacemos parte, nos sentimos mal cuando somos excluidos, pero no podemos llevar eso al extremo, porque nos perdemos de nuestro camino, de nuestra esencia.
Los miedos, conflictos interiores, los condicionamientos fruto de nuestra historia personal que cargamos, muchas veces nos dificultan poner límite a lo que no queremos, porque no aprendimos a comunicar asertivamente nuestros deseos, necesidades, gustos.
No te dejes llevar por los demás, no permitas que tus miedos sean tan poderosos que te hagan perder tu voz interior, tu autoconfianza, tu autoestima. Recuerda que cualquier cambio que quieras hacer en tu vida empieza por comprender y aceptar lo que te pasa, lo que sientes, el primer gran cambio en la comunicación con los otros empieza por comunicarte de manera diferente contigo, empieza por abrirte a escuchar tu alma.
Paola Ostrowicz Fischman
Terapeuta energético y vibracional
www.somosarmonia.com
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